Alan Cruz Villacorta organizador del XIV Festival Incas Metal del Cusco.
Kenny V. Azurin:
El día sábado dos de agosto del 2008, tuvimos la ocasión de congratularnos de un importante acontecimiento musical en la ciudad del Cusco. Por decimocuarta ocasión se efectuó a cabo el Festival denominado Incas Metal; espectáculo que viene consiguiendo una fortuita lección dentro de la multiplicidad cultural que caracteriza a esta ciudad andina.
Hace aproximadamente dos décadas la cultura metal se acento en el sur peruano, y su desarrollo adquirió marcadas particularidades que caracterizan a las distintas regiones meridionales del Perú, y en el Cusco de hoy no solo podemos connotar la existencia de bandas formales y efímeras con fuertes tendencias que caracterizan al metal, sino que se ha convertido en el epicentro del “movimiento underground”; y este festival no fue otra cosa que el resultado de ese encuentro interactivo que capitalizo la distintiva cualidad de cada una de las bandas que ocuparon su escenario.
A lo largo de su formación las bandas del sur del país vienen promocionando sus producciones creativas sean en discos o maquetas en sus localidades respectivas, mediante conciertos, recitales o festivales como el Incas Metal; muy al margen de cualquier intento filantrópico de institucionalidad u otro orden.
En ese sentido el Incas Metal mas que un festival, cumple una gran iniciativa en promocionar bandas que demandan un merecido espacio dentro de la escena musical. Mediante este festival se ha sabido estrechar lazos de comunicación entre concurrentes, bandas, organizadores y melómanos de las distintas esferas del Perú y del mundo.“Se trata de integrar bandas de las distintas ciudades, dado que el carácter del festival es evidentemente motivacional que permitirá reconocer el nivel técnico de los grupos; estamos seguros que a partir de la fecha estas bandas podrán participar y compartir futuros encuentros de escenario”.
El festival se llevo a cabo en un amplio patio del denominado Casa Montesinos; recinto ubicado en una prominente colina cercana a la ciudad del Cusco, desde donde también se podía observar la muy iluminada capital Inca. Para llegar había que subir en bus que fue previamente preparado por los organizadores. El móvil estaba instalado en un pequeño ovalo que llevaba por nombre Limac Pampa Grande, algunos espectadores subieron en taxi y claro nosotros como muchos peinamos la estrecha carretera camino cuesta arriba.Al llegar a la cima nos sorprendimos con la belleza del paisaje que se dibujaba alrededor nuestro, de hecho no fuimos los primeros en arribar al lugar, ingresamos al recinto en el momento preciso de las pruebas técnicas. Enfrente y entre una arboleda de pinos se encontraba instalado el estrado; en el fondo del mismo un panel con una singular imagen atrapaba la vista; una suerte de mural barroco “kitch”, de esas que caracterizan la estética metal flotaba distinguiendo el escenario.
Atrapados por la emoción no paramos de movernos en todas direcciones tratando de encontrar algo que satisfaga nuestras turbaciones. Circulaba el comentario de que la gente se fue sumando desde muy temprano (cuatro de la tarde). Intrigados por la curiosidad aprovechamos para recoger algunos comentarios de los participantes que ya se había armando frente al estrado principal.¿Cómo percibes las expectativas de este festival?
El sonido esta espectacular y el evento me parece un paso adelante para el desarrollo del metal en el Cusco, y lo que estamos viendo aquí es un esfuerzo humano para hacer un festival como se hace en Alemania. Yo creo que en los años posteriores esto será mucho más grande, y me da pena que no estén las bandas extranjeras que iban a participar.
¿Cómo van los estados de ánimo para este gran encuentro?
Estoy muy emocionado y creo que todos estamos ansiosos para que esto se de inicio de una vez, el local es muy bueno. Es un evento similar al “Waken Open Air” de Alemania; ojala todas las bandas cumplan con subir al escenario.
¿Valió la pena invertir el monto económico y el esfuerzo de subir hasta acá arriba para ver el festival?
No nos importa el costo de las entradas sino lo que se quiere es ver una cosa cultural que valga la pena, tanto en la organización, la calidad de las bandas, y que el evento sirva como un impulso para futuros encuentros.
¿En que medida crees que será importante este evento para los concurrentes y la escena local?
De hecho las bandas tienen sus propios temas y lo que se quiere es que se hagan conocer. Salga como salga el festival esta vez, estamos seguros que serán positivos para que se establezca y se respete el desarrollo de este proyecto sobre todo por parte de la institucionalidad ya que para ellos el metal es mal visto. Los que apreciamos verdaderamente el metal lo vemos de otro modo; la idea es romper los estereotipos que giran en torno a este género musical; nosotros valoramos el filin de las bandas.
¿Crees que este espectáculo favorezca la movida del metal en el Cusco?Pienso que la escena va a mejorar de acá para adelante; esto es como Wood Stock (risas), creo que el mismo nombre del evento así como el local compaginan muy bien; Incas Metal va a ser un respeto después de esta. Una iniciativa para las bandas locales. Muchos de los músicos que conozco están aquí y eso es confraterno.
Existe una entrega y convicción identidaria por este genero en los concurrentes, y precisamente esta fue la razón que motivo a los chicos y jóvenes de otro modo, ocupar el espacio desde muy temprano para no perderse absolutamente nada del festival.
“Lo mejor del metal en el Perú esta en la zona andina, por no llamarlo “provincia”; llevamos la música en el corazón sin prejuicios como la gente de otro lado. Aquí todos somos uno solo y esa es la esencia del metalero”.
A medida que nos ubicábamos en el lugar tuvimos la curiosidad de conocer a los muchachos de la banda ayacuchana SATRIAS, que estaban ubicados en el extremo izquierdo del estrado.¿Coméntanos sobre la travesía del viaje que tuvo la banda?
Fue un viaje de veintidós horas desde Ayacucho hasta el Cusco, el setenta por ciento de la carretera es trocha, un viaje matador para la banda, tuvimos un poco de temor puesto que hubo una volcadura entre Andahuaylas y Ayacucho, afortunadamente llegamos muy bien y esperamos que el retorno sea positivo.
¿Cómo esta organizado la banda?
La banda se formo en el 2002, somos un quinteto que surgió a raíz de dos proyectos distintos pero con ideas comunes. La banda esta conformada por Cesar Soto en la batería, Jesús Vejar en la segunda guitarra, Richard Ledesma en la primera guitarra, Alfredo Cárdenas en la voz y Guillermo Guevara en el bajo. Estamos preparando un demo de ocho temas para el mes de octubre que llevara por titulo “Rincón de Muertos,” apelando a los acontecimientos político – militares que se suscitaron durante la década de los ochenta en nuestra región.
¿Qué estilo viene desarrollando la banda?
Tenemos un acercamiento al clásico Death, pero le rendimos mayor interés a las cuestiones vivenciales, son temas realistas enfocados a lo que paso en la guerra.
¿Cuál es el repertorio de SATRIAS?
Bueno tuvimos presentaciones en la ciudad de Huancavelica y Huancayo. Tenemos una gran expectativa de este evento que será positivo para la banda. El local esta buenazo, estas actividades deberían hacerse mas seguidos en otras ciudades como una forma de descentralizar.
Allí también conocimos a Alan Cáceres un muchacho que vino en representación de Nacho Pop Underground T – Shirts; empresa que desde Lima se sumo como auspiciador del Incas Metal.
¿Cómo así Nacho Pop se animo a participar en este evento?
El siempre auspicia conciertos en Lima y ahora se dio la ocasión de participar en el Incas Metal, dada la importancia del festival, la variedad de bandas del interior del país y la importancia de la ciudad del Cusco.
No había tiempo para mas y esto comenzaba a exacerbarse, exactamente a las cinco y treinta de la tarde se dio inicio con el festival; el “Tampa” y su banda Transmisión fueron los primeros en romper la monotonía del ambiente, con un experimental sonido sicodélico, ante un público que por lo pronto no superaban las ciento veinte personas, todos vestidos de negro. “Chupen y muevan las putas cabezas”; fue lo que se oyó antes que la banda de inicio al espectáculo.
Allí al costado estaba la gente de Abancay a quien saludamos y nos dirigimos con un par de preguntas.¿Cuáles son tus expectativas para este evento?
“El sonido esta excelente y esto recién esta comenzando pienso que estará muy bueno; brindaremos después”.
Mientras Transmisión estaba calentando el ambiente vespertino un bus repleto de varios grupos terminaba por llegar, entre ellas se encontraban los integrantes de la banda CRUEL de Tacna, nos dirigimos donde Jorge Palacios, vocalista de la agrupación para que nos comentara algo sobre la banda.
¿Qué nos puedes informar sobre el viaje del grupo?Hace una hora llegamos y el viaje estaba tan pesado, fueron veinte horas de marcha, encima subieron al doble los pasajes por la fiesta esa de la Virgen de Copacabana en Bolivia, estuvimos muy preocupados felizmente ya estamos acá.
¿Cuántos temas tienen preparado para el evento de hoy?Tenemos diez temas seis de los cuales corresponden al disco anterior, y los cuatro restantes son nuevos que estrenaremos esta noche. Los temas tienen una mezcla de trush y death; las producciones últimas son más acelerados y tienen mucho filin.
¿Cómo esta formado CRUEL?Tenemos dos primeras guitarras Daniel Gamarra y Giancarlo Yánez, Ricardo Bras nos acompaña en el bajo, Aldo Laguna ocupa la batería, y Jorge Palacios en la voz.
¿Qué expectativas consideras importante de este evento?La expectativa es muy buena, hay buenos equipos, el local esta espectacular, lo que faltaría seria una mayor organización, se presta todo y me vacilan la ubicación y los árboles, un concierto en el campo es genial. Considero que este evento será importante por que esta integrando todo el sur prácticamente, además estamos conociendo bandas de otro sitio.
Luego de esa breve entrevista nos dirigimos cerca al estrado principal para ver a cada uno de los trece grupos que se exhibieron en el escenario. Las bandas que se presentaron en este festival eran procedentes de Arequipa, Juliaca, Puno, Cusco, Tacna, Ayacucho y una de Bolivia, todos pusieron lo suyo. Las agrupaciones que formaron parte de este oscuro rito se hacían llamar:-Transmisión (Cusco) Hard y Heavy Metal.
-Despondent Chants (Cusco) Doom y Death.
-Sphcelated (Cusco) Death Gore.
-Legion Saqra (Arequipa) Death Metal.
-Insanity (Cusco) Death Metal.
-Cruel (Tacna) Black y Doom Metal.
-Dark Perverseness (Puno) Black Metal.
-Sicarivn (Cusco) Thrash Death y Progressive Metal.
-Thrashtorno (Juliaca) Thrash Metal.
-Nordic Wolf (Bolivia) Black Metal.
-Satrias (Ayacucho) Death Metal.
-Velatorio (Cusco) Black Metal.
-Argentreum (Cusco) Black Metal.
La hostilidad de la helada y el viento nocturno tuvieron un efecto severo en los concurrentes; lo que motivo a la gente encender fogatas en medio del patio, de hecho hubieron personas que ni siquiera sintieron la pegada del frío. Mas adelante la bulla se impuso en todo el ambiente que limito nuestra actividad, ya no pudimos conversar con integrantes de las otras bandas y el público comenzó a conectarse con la acción de los músicos.
A eso de las diez de la noche el amplio recinto estuvo ocupado por mas de trescientos citadinos y concurrentes procedentes de las distintas ciudades del Perú identificados con el metal. Un marcado porcentaje que apenas bordeaba el quince por ciento de los asistentes era de sexo femenino. El ambiente colectivo se lleno de furor y la gente comenzó a manifestarse con el pogo, el mosh y las bebidas que circulaban por doquier prolongaban los encuentros.
El evento fue un verdadero performance colectivo; un rito catarquico y lóbrego, donde duros golpes de guitarra y voces guturizadas se mezclaron en ritmos agridulces, entre aquellos cuerpos que batían sus melenas, amotinados y exhaustos de tufo masculino y delirio femenino, añorando su entrañable libertad y regando los deseos hasta la colmación.Fueron aproximadamente doce horas que duro esta importante actividad. La fiesta se inicio a las cinco y treinta de la tarde y finalizo cerca a las seis de la madrugada del siguiente día, la satisfacción tanto del público como de las bandas y los organizadores del evento fue total.
Finalizada el espectáculo la gente salía muy contenta y las bandas fueron muy aclamados por la calidad y el tesón que pusieron en el escenario. Las bandas de tanto de Ayacucho, Tacna y Bolivia, se llevaron un gran reconocimiento por el esfuerzo que hicieron en venir desde muy lejos.
Si bien es cierto que no hubo ninguna banda que represente a nuestra región de Apurimac, el público abanquino estuvo presente desde la apertura hasta el final del espectáculo.Para finalizar con el presente informe había que conocer al organizador del festival que tenia un nombre; Alan Cruz Villacorta. Alan estuvo bajo la dirección del desarrollo del festival desde un inicio; mucho antes de pegar los afiches o convocar a las bandas, el Caliche se dirigió a el para recoger su manifestación y los resultados del infatigable trabajo que había desempeñado por mas de dos meses.
¿El festival se cumplió con las expectativas que se propuso desde un inicio?Las expectativas del Festival Incas Metal eran grandes y, todos los asistentes al concierto salieron felices, eso demuestra que si se cumplieron las expectativas.
¿En que medida este evento supero a las otras actividades del Incas Metal?
Esta fue la primera ocasión en que el concierto se hizo al aire libre, por que los anteriores Incas Metal se hicieron en locales cerrados, además se invito a bandas de casi todo el sur del Perú y por supuesto las bandas locales, el sonido fue de primera, el escenario y todos los detalles, de eso eres testigo.
¿El equipo organizador supo descubrir los errores técnicos del evento?Esto fue una gran experiencia para las personas que estamos detrás del Incas Metal; naturalmente ha habido algunos defectos que en líneas generales pasaron desapercibidas, aunque esta demás mencionar a gente mal intencionada que lo único que quiere es sabotear el Incas Metal, y todo nos ha servido para que en posteriores ocasiones se mejore el nivel del festival.
Luego de esta corta entrevista Alan se despidió de nosotros, de hecho lo vimos muy contento junto al equipo que lo acompaño siempre, por que los esfuerzos si que tuvieron resultados óptimos. Cabe acotar que hubo un descontento notorio en los organizadores sobre bandas como Zadeath, Voodoo Child y Sabotaje, que no cumplieron con el horario establecido en el ejercicio del concierto. Este tipo de hechos afectan directamente la imagen de los organizadores, los patrocinadores, así como de las bandas, ante ese público que participo del evento. Este hecho de irresponsabilidad creo que merece una profunda reflexión, para que en el futuro no vuelva a repetirse por el bien de escena en cualquiera de nuestras ciudades, bueno desde aquí solo nos queda agradecerle al publico lector por darse la molestia de interpretar esta lectura, muchas gracias y hasta siempre.
